Reims es una ciudad en el noreste de Francia, famosa por su historia, arquitectura y, por supuesto, su champán. La ciudad ha sido un importante centro de la producción de champán durante siglos y cuenta con algunas de las bodegas más antiguas del mundo.
Uno de los principales atractivos de Reims es la Catedral de Notre-Dame, una impresionante obra de arquitectura gótica construida en el siglo XIII. Es conocida por sus magníficas vidrieras, que datan del siglo XIII al XX. La catedral fue también el lugar de coronación de los reyes de Francia durante siglos, y cuenta con una historia rica y fascinante.
Otro atractivo turístico de la ciudad es la Basílica de Saint-Remi, una iglesia del siglo XII que alberga la tumba de San Remigio, el obispo que bautizó a Clovis, el primer rey cristiano de Francia. La basílica cuenta con una hermosa fachada románica y un impresionante claustro.
Las bodegas más antiguas y prestigiosas de champán, como Veuve Clicquot y Taittinger, tienen sus raíces en la ciudad. Los visitantes pueden disfrutar de catas y visitas guiadas por las bodegas, para conocer de cerca la elaboración de esta bebida.
También hay otros sitios turísticos que son interesantes para visitar en la ciudad, como el Museo de Bellas Artes de Reims, que alberga una impresionante colección de arte desde el siglo XVI hasta la actualidad.
El Palacio de Tau, que fue una vez la residencia de los arzobispos de Reims, es ahora un museo que cuenta la historia de la ciudad y sus vínculos con la monarquía.
Para llegar a Reims, se puede tomar un tren de alta velocidad desde París, lo que hace que la ciudad sea una opción perfecta para un viaje de un día desde la capital.
También se puede llegar en coche desde París en menos de dos horas.
