Declarada monumento histórico desde 1862, la abadía borgoñona de Fontenay es la abadía cisterciense más antigua que se conserva. Está inscrita en el patrimonio mundial de la Unesco desde 1981.
La abadía de Fontenay es una preciosa construcción de arquitectura cisterciense de una de las mayores órdenes monásticas de la Edad Media, la orden de Cîteaux, creada a comienzos del siglo XII.
Aquí, la mayoría de los edificios y salas de la abadía están notablemente bien conservados: considerada como la iglesia tipo de la arquitectura cisterciense, con su claustro, sala capitular, sala de los monjes, calefactorio, enfermería, forja, dependencias de los abades, palomar, hospedería, panadería, portería, así como el jardín de simples… Con su arquitectura desnuda, la abadía ilustra magníficamente el ideal de la vida autárquica de las primeras comunidades de monjes cistercienses.
De Cîteaux a Fontenay
La abadía de Cîteaux, en Borgoña es, en el siglo XII, la cuna de la nueva orden gracias a la llegada del carismático Bernard de Clairvaux (Saint Bernard) que la encabeza. La orden cisterciense promueve ascesis y rigor litúrgico, insistiendo en la importancia del trabajo. Su éxito se impone muy rápidamente, a través de toda la cristiandad, y se multiplican las fundaciones de monasterios cistercienses.
Un medio natural hostil pero domado
La historia de Fontenay, al norte de Borgoña, es testigo de este auge. En octubre de 1118, Saint Bernard establece aquí una pequeña comunidad monástica, bajo la responsabilidad de su tío, en una finca densamente arbolada, en el corazón de un pequeño valle con bosques y estanques.
Muy rápidamente, la llegada de nuevos monjes lleva a la orden a edificar un gran monasterio. Son necesarias obras importantes de desbrozo y de drenaje. En Fontenay, al igual que en otras abadías, los primeros cistercienses demuestran su capacidad para enfrentarse a un medio natural hostil, domar el agua y moldear el paisaje para garantizar su subsistencia.
En Fontenay, al igual que en Cîteaux, Clairvaux, Bellevaux y Clairefontaine, las comunidades cistercienses se instalan en el corazón de la naturaleza, en espacios vírgenes o en valles profundos.
Más de 120 000 visitantes cada año
Cada año, más de 120 000 visitantes vienen de todo el mundo para admirar este conjunto excepcional.
Para ir más lejos
Oficina de turismo de Borgoña
La abadía de Fontenay, en el sitio web del Ministerio de Cultura
La abadía de Fontenay, en el sitio web de la Unesco